Ayuso, la lideresa
en coplas. Hoy se presenta PORQUE ME DA LA GANA
LA EDITORIAL Ramón Akal acaba de
publicar dos nuevos libros, de rabiosa actualidad que
dirían los viejos gacetilleros, en su nueva colección A Fondo. Uno es
Porque me da la gana. Ayuso, la nueva lideresa; del que es autora Alicia
Gutiérrez, periodista explosiva y, a la vez, sólida y reposada, que nos
tiene acostumbrados a descubrir escándalos de alta temperatura política. Seguro
que todos ustedes recordarán el caso Urdangarín y la confrontación con su suegro, el actualmente Rey
Emérito y fugitivo, Juan Carlos I. No es la primera vez que Alicia Gutiérrez se
ve las caras con la lideresa, discípula aventajada de dos lobas de
colmillo retorcido, Dolores Aguirre y Cristina Cifuentes, que la
precedieron en el cargo, más fámula y alumna de la Aguirre que de la Cifuentes,
la cleptómana de las cremas. Que conste, y no quiero desmarcarme, que yo defendí
en ocasiones a Cifuentes porque ésta ayudaba al teatro, los Kamikazes,
de Israel Elejalde, Miguel del Arco, los animalarios y su tropa del Pavón de Lavapies. En
vísperas de las elecciones madrileñas de 2021, una información de Alicia, periodista que nunca se creyó en el país de
las maravillas, obligó a Ayuso a
enmendar su declaración de la renta, al revelar el nombre de una
empresa por ella participada en el 50 por ciento.
El otro libro de Akal se titula Vox;
el retorno de los ultras que nunca se fueron, firmado por Xavier Rius Sant. Es impepinable, todo
suceso existe para ser contado; si no, no sucedería. Más tarde o más temprano, aparecerá
el pendolista y sus amanuenses que se hagan cargo de él y lo revelen. Si esa
ley, determinante aunque nunca escrita, no existiera, las cosas no ocurrirían. No vale decir que
existirían de otra forma. No existirían, simplemente. Si existieran de otra
forma ya no serían las mismas cosas.
Lo de rabiosa actualidad, al
referirme a estos dos textos, no es que la actualidad vaya por ahí dando
mordiscos a la vida y echando espuma por la boca, Quiere decir que es el
momento oportuno, ese momento que está esperando implacable una pluma
esclarecida y aguda que lo revele, El mundo está hecho para ser contado, y lo
que no se cuenta no existe. Lo mismo pasa con las penas y los dolores. De estos
nace la poesía. Si no existieran, si siempre fuéramos felices la poesía no
existiría. Y no vale decir que existiría de otra manera. No existiría
simplemente.
Del libro de Alicia Gutiérrez se desprende que Ayuso es una killer de
la política, sin proponérselo ni planes de estrategia, le sale del natural. Sin
complejos. Y sin escrúpulos. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel
Diaz Ayuso sobrevivirá a este libro de Alicia Gutiérrez, Porque me da la gana, como
ha sobrevivido a tantas peripecias de su vida política. Es más, acostumbrada a
superar todas las tormentas, yo creo que su imagen saldrá robustecida,
descuartizada, odiada y también amada hasta la extenuación. Lo de amada quizá
no sea tanto, pues Ayuso ha ido dejando muchos cadáveres, cadáveres
políticos se entiende, en las cunetas y algunos sin enterrar o mal enterrados.
Es el caso de Pablo Casado, que se rumorea va a volver a la política.
Puede el palentino volver a la política, aunque yo no me lo acabo de creer.
Casado fue amigo suyo y protector. Más tarde cavó su propia tumba, al denunciar los cambalaches y corrupciones de un hermano
de la lideresa, sobre mordidas en el tráfico de mascarillas o algo así. Un
hermano es un hermano y a ti te encontré en la calle. Pablo Casado, en las antípodas de mi
pensamiento político, y más liberal en el sentido estricto de la palabra que
Ayuso, nunca me ha parecido un ser vengativo. Pero sí demasiado inocente, un
pececillo entre tiburones. E Isabel, Isabelita para los íntimos, es una
tiburona blanca que, dicen, son los peores de los feroces escualos.
El retorno de los que nunca se
fueron
Xavier Rius Sant es el clásico periodista
de riesgo y aventuras, el freelance que todos queríamos ser cuando abrazamos
esta dura y fascinante profesión. Su especialización es la no especialización,
es decir la diversidad. Ultraderecha y terrorismo es, quizá, lo más atractivo
de sus trabajos. Vox y el retorno de los ultras que nunca se fueron es
una historia de la reciente ultraderecha española con sólidas raíces en el
fasciofalangismo tradicional de partido único, pensamiento único y
nacionalcatolicismo. Los Vidal Quadras, Santiago Abascal y, sobre todo, her
Ortega Smith, nazi confeso, hoy concejal del Ayuntamiento de Madrid,
consejero o algo así de Almeida. Macarena
Olona, es una especie de verso suelto, ninguneada por el aparato de Vox y arrojada a las tinieblas exteriores por
donde vaga sin encontrar la luz. Por Ortega Smith, y cómo va a resolver su posible horizonte penal tengo yo
especial atención. Desde hace tiempo vengo llamándole el calumniador de
las 13 rosas, 13 muchachas fusiladas por Franco contra las tapias de un
cementerio. Vox, el retorno….se lee de un tirón, como si de una novela
negra se tratara.
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