jueves, 17 de noviembre de 2022

Aute

Un renacentista

El último renacentista, al menos,  que yo conozca. Pintor, poeta, músico, escenógrafo, cantautor, arreglista de textos de teatro y de cine, hombre de bien. Las sendas de la vida son inescrutables y los caminos del señor todavía más, y en consecuencia ignoro, aunque puedo presentirlo,  a cuento de qué convoco ahora y a cuatro años de su muerte, el recuerdo de Luis Eduardo Aute. Por este creador de arte  mantengo una admiración total   y con èl mantuve  una razonable e intermitente amistad, según estados de ánimo y la sensación que me produjeran sus cuados o sus enigmas.  Yo andaba entonces entre pintores, marchantes de arte, galeristas y toreros y tenía conocimiento de su actitud en defensa de la Fiesta cuando la Generalitat quiso prohibirla en Cataluña. No creo que le gustaran especialmente  los toros, fue el gesto, la actitud ante las prohibiciones liberticidas lo que me llamó la atención. Y me fijé en su pintura que tendia a cierto expresionismo abstracto me parece recordar, en la línea   de Oscar Kokoska, más o menos, aunque no creo conociera esta pintura. Antes que nada Aute se consideraba pintor aunque fuera la música y la canción lo que le diera fama, dinero  y tirón `popular. Aventuro una razón de esta    evocación que me ha asaltado. Con motivo del aniversario de los últimos fusilamientos del franquismo 27 septiembre de 1974,  ya sin rosas en el mar,  ha vuelto a sonar con fuerza Al alba, al alba, la más célebre canción de Aute, un homenaje de rabia y de dolor a los fusilados entre los que se encontraba algún amigo suyo. Paredes Manot , Txiqui, y Otaegui, miembros de ETA  Umberto Baena, Jose Luis Sanchez Bravo y Ramón García  Sanz, miembros del FRAP, Frente revolucionario antifascista y patriótico    Aute canta y llora , no quiere quedarse sólo porque sabe, como muchos que se niegan a cerrar los ojos ante la infamia, lo que va a pasar al amanecer. Los fusilamientos siempre ocurren  al amanecer  al alba al alba....Ni el clamor internacional de las democracias que retiraron sus embajadores, ni el Vaticano de Pio VI ,  creo recordar., torcieron la voluntad asesina y vengativa del dictador cruento y genocida., Los embajadores volvieron y Franco murió al poco tiempo, torturado no por su conciencia, sino por la enfermedad.

Si te dijera,  amor mio

Que temo la madrugada.

Maldito baile de muertos

Símbolo de su guadaña

Maldito baile de muertos

Símbolo de su guadaña