jueves, 30 de abril de 2020

PALENCIA Y LOS MANRIQUE



Poesía, armas y repostería. Este articulo ha sido publicado en el Diario Palentino.

El día 24 de abril, más o menos, se cumplió el aniversario del nacimiento de Jorge Manrique, 1440, Paredes de Nava, sobrino de Gómez Manrique político belicoso y pendenciero, de su tiempo; y en cierta medida creador del teatro español con el Auto de los Reyes Magos, escrito exprofeso para las clarisas de Alar del Rey, de las que era abadesa su hermana. En una zona marcada por el triángulo Amusco, Carrión de los Condes y Paredes de Nava se condensa buena parte de la historia de España en sus momentos de esplendor. Y eso sin citar a Villoldo, pueblo agrícola y cangrejero, donde nació Juan de Villoldo, un imaginero de escaso renombre, pero de notable trayectoria. Por todo esto Villoldo, pudo ser el eje de un resplandor hoy inexistente y centrado en la fama repostera de los amarguillos, pastas de almendra cuya fama, en tiempos, eclipsó la popularidad genuina de la pastelería El pistolero, de Carrión de los Condes. Hoy Villoldo es una referencia familiar, la señá Julia, Miguel Hoyos y Arturo Gil, un séneca de pueblo que me pone al tanto de las no infrecuentes controversias de la comunidad.
Ignoro por qué razones a la pastelería exquisita de la calle la Rúa se la llamaba el Pistolero.   Lo que importa hoy,  es  la historia de Carrión más que su presente, aunque aquí naciera un excelente actor imprescindible en los repartos de postín de Madrid, Antonio Medina. Carrión es el lugar donde nació don Iñigo López de Mendoza, Marqués de Santillana, el de las serranillas, y por la alusión perpetuada en la leyenda, los infantes que, en el Robledal de Corpes, agraviaron a las hijas del Cid, doña Elvira y doña Sol. Carrión de los Condes, sin esplendores, sigue siendo el punto de referencia histórico de la provincia, con Paredes de Nava patria, disputada con Jaén, de Jorge Manrique, el de las Coplas.  Yo sigo defendiendo Paredes de Nava. Pero si despojamos a Paredes de Jorge Manrique, no importa; le quedan los Berruguete. Torre de los Molinos, es la aldea en la que nací, hoy casi deshabitada, donde me tienen dedicada una plaza frente al solar de la casa en que viví. Yo desconozco los méritos, salvo el afecto de un excalde socialista, Benigno, que se empeñó en honrarme. Mi padre, peatón cartero de Carrión a Torre y artista forjador del hierro en el santuario de su fragua, y mi madre, sí me creían con méritos. Mi madre me dijo al abandonar la aldea, “hijo que no te pase lo que a Quevedo” Posiblemente la persona más notable de Torre de los Molinos no sea yo sino Domingo Merino, un ser inteligente y honrado, en quien se cumplen todos los requisitos del tópico, “hacerse a sí mismo”. De él aprendí algo que España entera debiera aprender: “Javier, las guerras civiles no las gana nadie, las pierden todos”. En estos momentos quizá conviniera recordar esto.


viernes, 24 de abril de 2020

Rodrigo Rato, el felón en libertad



 Rodrigo Rato, felón y en libertad

Soneto primero 
Lujo desenfrenado, lujo obsceno
En una España pobre y deprimida.
Lo que a unos da  la muerte a otros da vida.
Unos degustan  miel y  otros, veneno.
Tarjetas de Oro y Plata, sobre el cieno
De una España procaz y malherida
despojada de honor y sometida
A un poder de  truhanes ciego  y pleno.

El más truhán y más sofisticado
El más golfo y felón, Rodrigo Rato
Europeísta de discurso y trato
Liberal, millonario, despechado
Por no haber sido presidente nato,
De  Aznar y de Rajoy ninguneado.

lunes, 20 de abril de 2020

JULIAN GRIMAU, IN MEMORIAM


GRIMAU y GAMERO

Ignoro qué estaría haciendo, en estas horas de peste y confinamiento, el excelente actor genérico Antonio Gamero, cuyo lema era, “en ningún sitio tan bien como fuera de casa”. Lo traigo a colación con motivo del aniversario del fusilamiento de Julián Grimau, arrojado  desde una ventana de la DGS al callejón de Pontejos y después fusilado, amarrado a un poste porque no podía tenerse en pie. “Por esa ventana tiraron a Julián Grimau y luego  dijeron que se había querido suicidar”, me contaba Gamero cuando salíamos de alguna función en el Albéniz. A Grimau, torturado,  hubo que atarlo a un poste para fusilarlo, pues no se tenía en pie. Eso me contaba Gamero,  que se había quedado sordo por el golpe de una máquina de escribir que le tiró a la cabeza el policía que le interrogaba. Hay pocas dudas  sobre Grimau, salvo la incógnita de por qué el miserable de Santiago Carrillo, lo mandó a España a reorganizar el Partido, compartiendo responsabilidades con Federico Sánchez, o sea Carlos Semprum.  Lo cazaron enseguida. Manolo López, del Comité Central del PCE me contaba  una temeraria broma que Domingo Dominguín les gastó a ambos en las Ventas, de las que creo era empresario.  Querían ver la Corrida de la Beneficencia, tradicionalmente presidida por Franco y les dio dos invitaciones cerca del palco, entre una legión de  maderos. Vieron la corrida acojonados. Cuando le echaron la bronca por el riesgo que les había hecho correr, Domingo contestó: “En ningún sitio podíais estar más seguros que rodeados de policías”. Cosas de Domingo Dominguín que acabó suicidándose en los años setenta, unos dicen que por un cáncer de colon, otros que por un desengaño amoroso y otros, los más, que por culpa de Luis Miguel Dominguín, su hermano que no quiso prorrogarle la concesión de una plaza en América, sus únicos ingresos.

jueves, 16 de abril de 2020

LA ALFARERA QUE NUNCA EXISTIÖ. O SÍ


El enigma sin descifrar
Mi amiga no era alfarera, aunque trabajaba en un alfar y modelaba primorosamente. Pero no vivía de eso, no sé de qué vivía. Vendía alguna pieza,  sin preocuparle el precio, o la regalaba por capricho. Con frecuencia me decía “no soy la mujer que tu piensas”. En verdad yo no pensaba nada. Pero le hice la promesa que me pedía dando ella por descontado que yo la cumpliría: “sé que nunca escribirás ni dirás nada que dañe mi imagen de mujer”.
Yo era crítico de arte de una revista minoritaria pero muy prestigiosa. No admitíamos publicidad ni los pintores o escultores podían pagar con un cuadro ni la portada, ni una reseña favorable. A la Alfarera Prodigiosa le gustaba la revista, sencilla, que se llamaba Crónica3, pero nunca puso demasiado empeño en salir en ella. Llegaría el día por su propio peso debía pensar. En París y en Londres las revistas especializadas le habían colmado de elogios. En especial, la periodista  más temida de Paris por su dureza muy bien sustentada intelectualmente, Justine Meaunier. Que le hiciera una crítica adversa de sus barros y sus figuras no podía dañar su imagen de mujer, sino su condición de artista. Deduje que mi amiga era sáfica o probablemente y, lo más seguro bisexual,  no de su conducta conmigo sino por sus figuras y su modelados. Le gustaba la palabra sáfica y detestaba la palabra lesbiana. Las parejas de mujeres, besándose, abrazándose o acariciándose con ternura infinita, tenían una tensión formidable. Las parejas de hombre y mujer eran más despreocupadas, como sin acabar, y el hombre, pese a su instinto agresivo y dominador irreprimible, era un ser indefenso. Y la mujer, una mujer distante, indiferente. Las hacía porque algunos clientes se la pedían, solo encargos muy especiales.  “Me gustaría modelaras un retrato mío”,  le dije un día. “Quizá  cuando reciba una carta tuya de esas que tanto me emocionan y que tardo en abrir, por miedo”. Yo nunca hacía alusiones morales o pasionales en mis artículos, pero no soy extraño  a cierto sicologismo consustancial a todo crítico de arte. Y las esculturas de mujer estaban tratadas con más amor. Nunca modeló hombres solos, como el David de Miguel Angel o el Pensador, de Rodin. Creo, resumiendo, que nunca conocí de verdad a la Alfarera Prodigiosa. Era la atracción del abismo, de un pasado joven que solo ella conocía, el misterio inconcluso…transformado en amor. No quería ser deseada, sino amada. Un día, en uno de sus viajes por el Caribe, me escribió que había descubierto su Hakuman o algo así, cosa que ignoro qué significa y preferí no indagar.  Step by step, paso a paso, voy reconstruyendo el rompecabezas; step by step es una filosofía que me ha llegado al corazón y más adentro, paso a paso. La Alfarera Prodigiosa me dice que no le ha tocado el virus de la pandemia, al que es inmune por razones que no me explica. Lo cual me  llena de felicidad.

jueves, 2 de abril de 2020

VERSTRYNGE ATACA DE NUEVO


Verstrynge y Podemos

Jorge Verstrynge fue nazi en su belicosa juventud universitaria y  mano derechísima de Fraga Iribarne que le sobrepasaba por la izquierda.  Ahora, al parecer,  se ha hecho  de Podemos, acaso por ternura  paternal a su hija, Liliht, uno de los cerebros de la formación. Hace años Jorge quiso afiliarse al psoe y Alfonso Guerra le negó la entrada. Parece ser que los podemitas tienen menos escrúpulos. Verstrynge tuvo estrecho contacto hace siglos con Pina López Gay, hija de un gobernador  franquista y secretaria de las Juventudes Maoistas. Raúl del Pozo publicó un artículo en el diario Pueblo, de Emilio Romero, titulado El nazi y la maoísta. Jorge y Pina se presentaron en el Café Gijón y le querían partir la boca a Raul. La cosa no fue a mayores, pero Raúl no rectificó. Los de mi generación nos acordamos de aquella pieza modélica. Ahora no he visto ninguna pieza modélica en los periódicos, debe de ser porque no los leo. El  Mundo de Rossel y Jorge Bustos, el ideólogo que dice preferir “un corrupto a un comunista”, no es el Mundo de PedroJ.
Nota larga a pie de página corta; La historia no es un cuento de locos contada por un borracho como dijo no sé quién. La historia de estos días la contaremos como una historia de tribulaciones, peste, seres heroicos y Servicios Sanitarios al borde del colapso y la extenuación; médicos y enfermeras expuestos al contagio. Una historia que ha aflorado  lo mejor de casi todos. Una historia que, por otra parte, ha descubierto también la vileza de la lucha política de partidos, la incapacidad solidaria de una España cainita con la quijada en la mano de los Caínes. Nunca le perdonaré a la caverna que sus ataques zafios y criminales me hayan hecho comprender el triste destino de un  político al que tengo pocas simpatías;  Pedro Sánchez. Quizá hemos perdido la oportunidad, otra vez, de estar unidos. Tendrá que venir otra guerra de la Independencia contra los franceses, para que este país llamado España, adquiera conciencia de unidad y fraternidad. Y en la cuarentena obligada de esta peste,  un voz coherente consigo mismo y discordante con el resto: Quin Torras, el molt Honorable de la Generalitat, temeroso  de que las tareas de desinfección y ayuda del ejército español sean un pretexto de invasión  por parte de España y un nuevo obstáculo para la independencia. ¡!!Cataluña sola!!!! claman algunos/as iluminados. De esta devastación que nos asuela, Cataluña no se salvará sola. Y los países de Europa bastante tienen con mirar su propio ombligo. A mí que me registren..!Soy de Palencia!