La belleza maldita.

Diario de Javier Villán

Agosto. Dias 3, 4 y 5.

 BELLEZA MALDITA Y COCHES USADOS.

Ocurrió el otro dia al regreso de una gran noche de teatro en el anfiteatro de Mérida, circunstancia ya reflejada en las páginas de El Mundo: Hécuba, la reina esclavizada, y la venganza. Decidí, acaso también como venganza contra el tiempo, recuperar la forma diarística, una vertiente de la literatura memorial. Para mí no es nueva esta necesidad que no alcanzan a remediar la poesía y otras formas de periodismo o literatura. Por algún rincón perdido deben de dormir varios cuadernos manuscritos de otros tiempos con fechas, hechos y desechos. A veces encuentro alguno y saco ideas para un poema, una narración breve, datos de algo o de alguien.
Hécuba, la reina de Ilión destruida, ha sido la ocasión y el despertar. Hécuba tiene una heroica capacidad de heroina para establecer una jerarquía de valores, para manejar los hilos de su trama. Por encima o por debajo de sus terribles peripecias, la devastación de la guerra. Y la belleza maldita; la belleza de Helena, la más hermosa  del mundo; la belleza virgen e inmolada ante la tumba de Aquiles, de Polixena; la belleza estéril  de Hécuba, sin su marido Príamo y sin sus hijos Héctor y Paris. Y convertida en perra que aúlla a la la luna.

¿COMPRARÍA A RAJOY UN COCHE USADO?.

Bajo la fotografía de Richard Nixon, torvo y receloso, cuando las mentiras de Watergate, se ponía una pregunta; "¿Compraría usted a este hombre un coche de segunda mano?". Ciertamente Nixon tenía pinta de vendedor a domicilio: trapacero y enredador; y seguro del poder sobre las amas de casa. El PSOE y EL MUNDO, a propósito del caso Bárcenas, han sacado a relucir aquella historia del Washington Post y la trama de espionaje, confidentes y corrupción. Ahora tienen marcado a Pedro Jota y supongo que, por extensión, a algunos de sus periodistas metidos en el ajo de la política; lo siguen hasta el vestuario y los lavabos como hacía Mangriñán, duro defensa del Valencia, cuando el entrenador le decía de Di Stéfano: "no te despegues ni un minuto de él". Este espionaje, al parecer tan obvio y chapucero, parece calcado de las peripecias de Mortadelo y Filemón. Ya no se respetan ni la educación ni las buenas formas de los Servicios Secretos. Después de todo esto ¿comprarían ustedes a Mariano Rajoy un coche de segunda mano?

PASIÓN DEL TOREO, TENTACIÓN DEL FUTBOL.

De la escuela de José Tomás y de la mano de José Miguel Arroyo; y con el toreo de Morante de la Puebla en la cabeza. Veo un video en una tienta de Jaime Miralles, un adolescente, que me envían desde Valencia. Le ví pegar muletazos, a las sillas, a los bancos y a los mozos sanfermineros hace unos años cuando Jaime apenas tenía seis o siete. Lleva el toreo en la cabeza, me dice Carlos Ilián, el crítico de Marca. Su hermano gemelo, Ximo va para poeta. Trato de inculcarle los clácicos, los Machado, la generación del 27, pero tiene una vena demasiado precoz de poeta maldito y urgencias por hacerse una biografía. Ahora quiere pasarse a la novela. Los dos son futbolistas y a los ha echado el ojo el Villarreal, que fuera equipo de mi admirado y genial Palop, portero. Tranquis muchachos y de momento no perdais de vista el fútbol. Sergio Ramos, Navas o Joaquín hubieran querido ser toreros,  y celebran sus goles con capotazos al banderín de corner.  Yo prefiero a  Morante de la Puebla, pero ahí está el fútbol. Alberta Camus, Premio Nobel, fue antes portero de fútbol; Chillida el gran escultor, fue defensa de la Real Sociedad. Y a Platko portero del Barcelona, "oso rubio de Hungría", Rafael Alberti le dedicó una Oda maravillosa.